La vida secreta de Walter Mitty
(The secret life of Walter Mitty)
"La vida secreta de Walter Mitty" está basada en un relato escrito por el humorista norteamericano James Thurber para "The New Yorker" el 18 de marzo de 1939.
Se hizo tan famoso que se llegó a establecer el "Síndrome de Walter Mitty" como aquel en el que una persona suele soñar despierta, crear un mundo de fantasía donde hace cosas que no puede o no se atreve hacer, más bien, en su vida real.
Pero ¿quién no ha querido ser otro alguna vez? ¿quién no sueña despierto?. Ya se hizo una versión en 1947, pero esta vez es el humorista Ben Stiller quien ha creado una versión moderna y lo ha hecho desde la dirección y la interpretación.
Para mí, que logre recordar ahora, es uno de los mejores papeles de este actor. Es una película cautivadora, que te hace reír, tiene momentos muy buenos, el del mar por ejemplo, no se porqué pero a mí me hizo mucha gracia entre otros.
Por otro lado le coges mucho cariño al personaje, tal vez porque te identificas con el fácilmente, o yo lo hago, no me imagino sus películas mentales, muy buenas y con grandes efectos especiales, pero ¿quién no se aleja a veces del mundo y al volver no sabes ni de que te están hablando?, no es que me enorgullezca de eso, me pasa sin querer jaja. Pero sobretodo porque somos muchas las personas que soñamos más que vivimos, queremos ser otra persona pero no hacemos nada por cambiar, tal vez por miedo, por que se está muy bien en la seguridad de lo conocido y de esto trata esta película, de dejar de imaginarse un mundo para estar en el.
Todo ello rodeado de grandes secundarios, el mejor, Todd, el trabajador de una página de ligar en la que está apuntado el protagonista. Otros como Cheryl interpretada por Kristen Wiig, una actriz cómica muy famosa por "Saturday night live" que ya vimos en "La boda de mi mejor amiga" y como no un perfecto Sean Penn como el fotógrafo freelance Sean O'Connell, que a pesar de que tiene un papel pequeño es el centro de toda la película y cuando sale llena la pantalla, hay que reconocerlo.
Yo creo que es una gran película, la he visto en vose, pero ya se estrenó en España. Me dio pena no haberla visto en el cine, pero duró muy poco en mi ciudad. El final es perfecto, la número 25 no podía ser otra.
Dos páginas y media de un relato que Ben Stiller ha sabido llevar a 114 minutos sin que uno mire el reloj, todo un logro en el cine de hoy en día. ^_^
